El pasado sábado 27 de Septiembre fue inaugurado en Tijuana uno de los proyectos más ambiciosos en materia cultural: El Cubo.
Con una inversión de más de 90 millones de pesos, El Cubo viene a darle a la ciudad un espacio museístico de primer nivel. Con una superficie de 1500 metros cuadrados de área de exhibición, este nuevo recinto cultural albergará exposiciones de talla internacional, regional y local centradas en tres temáticas: Bellas Artes y arte moderno, Patrimonio Histórico-Cultural y Arte Contemporáneo.
La inauguración estuvo encabezada por el Gobernador de Baja California, el Lic. José Guadalupe Osuna Millán y el presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CONACULTA), el Mtro. Sergio Vela, quienes junto al alcalde de Tijuana Jorge Ramos y la Directora del CECUT, Teresa Vicencio recorrieron los tres niveles que integran el nuevo inmueble para apreciar las exposiciones Buda Guanyin, Tesoros de la compasión y Proyecto Cívico.
Este espacio le dará a los tijuanenses la oportunidad de disfrutar exhibiciones que antes no podían ser presentadas en la ciudad por no contar con un espacio que cumpliera con los estándares internacionales que se exigen para la exposición de obras de talla mundial como son un control óptimo de temperatura, humedad, iluminación y sobre todo seguridad.
Con El Cubo Tijuana se integra al circuito internacional de museos. Se estima una afluencia de 300 mil visitantes por año los cuales se sumarán al millón de personas que visitan el CECUT cada año, según cifras proporcionadas por la administración.
Uno de los objetivos que se ha planteado el CECUT con este espacio es que sea un detonante en pro del desarrollo del Turismo Cultural tan necesario hoy en día.
El Cubo también contará con una librería, una tienda de artículos promocionales, guardarropa, oficinas, cafetería, bar, patios y terrazas.
Dos días antes de la apertura, la Directora del CECUT, Teresa Vicencio, sostuvo una charla con Kiosco 33. A continuación compartimos parte de la entrevista.
Maestra, por fin después de tres años de construcción Tijuana ya no sólo tendrá La Bola, sino también un Cubo. Platíquenos sobre este nuevo espacio museístico.
“El Cubo es el nombre que el arquitecto Eugenio Velásquez (que es el autor del proyecto arquitectónico que se seleccionó de entre 30 propuestas) le da a su propio edificio. El Cubo hace referencia a la búsqueda de un equilibrio geométrico en el paisaje urbano, donde tenemos La Bola, que es ya entrañable para todos los tijuanenses, esta Bola que alberga el cine IMAX y que tiene además en el conjunto otros dos edificios rectangulares (que es donde está la sala de espectáculos y el edificio central) y ahora se propone un Cubo. Este Cubo, de acuerdo con el arquitecto, también se une con el resto por una estructura metálica que hace un semicírculo desde la parte de afuera como evocando también la parte circular de La Bola. Las salas de exposiciones son cuadrangulares, cada lado mide 23 metros y están también haciendo referencia a lo que los curadores y los profesionales de exposiciones dicen sobre un cubo que es siempre un espacio a la espera de algo“.
¿A que nivel pone El Cubo a Tijuana en materia cultural?
“El Cubo hace una diferencia fundamental en las facilidades de los servicios culturales y en la infraestructura cultural de la ciudad. Es el único espacio en la ciudad de Tijuana que cuenta con las características museísticas que requieren los estándares internacionales. Con El Cubo ya no tenemos límite, en términos técnicos, en términos espaciales o en términos de la misma gestión, es decir, tenemos control de temperatura, control de humedad, control de iluminación; tenemos un espacio muy generoso, son 1500 metros cuadrados (para que se den una idea, actualmente la sala central del CECUT en su parte de abajo tiene 300 metros cuadrados y hemos montado exposiciones allí importantes) pues imagínense que ahora tendremos 1500 metros cuadrados exclusivamente para exposiciones. Por otro parte tenemos las áreas de servicio, tenemos las bodegas, las oficinas para curadores, talleres, las áreas de atención al público como es la recepción, las taquillas, el guardarropa, el restaurante, el bar”.
Con toda esta nueva tecnología de vanguardia con la que cuenta El Cubo ¿Se contratará personal mayor capacitado para estas exigencias o se seguirá trabajando con el mismo personal?
“El Cubo ha provocado la creación de una nueva sub dirección, no quiero decir que todos los que ahí estén sean nuevos, de alguna manera los equipos de trabajo del CECUT se están reacomodando, por ejemplo nuestros museógrafos tienen muchísima experiencia y alguno de ellos tiene más de 20 años trabajando, ahora han tenido que reaprender cosas, por ejemplo hace unas semanas estuvieron trabajando con los comisarios chinos y fue toda una experiencia para ellos el ver cómo se hacen las cosas del otro lado del mundo entendiéndose con un equipo que hablaba sólo mandarín. Ahora se ciñen mucho más convenios internacionales; ahora también estamos trabajando asuntos administrativos, de aduanas, de seguros y mil cosas más y lo hacemos con mucha más intensidad. Realmente ha sido un proceso de profesionalización para todos, en todas las áreas”.
¿Qué tipo de exposiciones o muestras albergará El Cubo?
Con estas dos exposiciones veo un equilibrio al presentar una exposición de talla internacional como Buda Guanyin y otra de corte regional (Proyecto Cívico). ¿Qué apertura tendrá El Cubo para los artistas locales?
¿El uso de El Cubo será sólo como sala de exhibición o albergará otro tipo de eventos artísticos?
“Hay usos alternativos y complementarios que tendrán que funcionar cuando ya las salas de exposiciones estén cerradas, por ejemplo el vestíbulo y la terraza superior (que tiene una vista hacia Paseo de los Héroes y hacia la explanada de La Bola) pueden ser susceptibles de albergar cócteles y eventos sociales de alguna naturaleza. El Cubo en su parte vestibular al centro tiene buena acústica, puede tener música, algún recital o algo así. Todo esto obedece a que sabemos que el CECUT es un espacio muy demandado, entonces estamos abiertos a esta posibilidad de que una vez que cierre sus puertas para su principal vocación que es la de mostrar exposiciones, podamos hacer este tipo de cosas que seguramente la comunidad las va a demandar”.
¿Quiénes participaron en esta inversión de más de 90 millones de pesos?
90 millones se dice muy rápido ¿Fue difícil la gestión de estos recursos?
“Hubo que ser persistentes. Es un proyecto que a mi me llena de esperanza, desde el punto de vista de la administración pública, digamos como funcionaria me llena de esperanza y ahora explico por qué: estamos malamente acostumbrados a ver que cuando hay un cambio de administración o cuando son demasiados funcionarios los que intervienen en la toma de decisiones es desafortunadamente más o menos frecuente que un proyecto se trunque, que un proyecto se retrase, que un proyecto se disminuya, se modifique sustancialmente; y mi experiencia (lo digo con todo el reconocimiento a quienes participaron con su voluntad en que esto se concluyera) es muy esperanzadora porque estamos hablando de un proyecto que trascendió dos administraciones federales y dos administraciones estatales, que quiere decir, que el proyecto lo iniciamos con el licenciado Eugenio Elorduy y lo concluimos con el licenciado Osuna Millán, que el proyecto lo iniciamos con el licenciado Vicente Fox y lo concluimos con la administración del Presidente Calderón; entonces a mi esto de verdad me da mucho gusto, habla muy bien de los funcionarios públicos que acabo de mencionar (…) Tienen todo mi reconocimiento y yo creo que es una prueba de que cuando una ciudad y una comunidad sabe plantear las cosas hay voluntad política que responde”.
La difusión de las actividades y eventos que realiza el CECUT es muy poca o casi nula en San Diego.
¿Qué planes tiene el CECUT para acercar más a la comunidad hispana que radica en California? ¿Se apostará más por el turismo cultural ahora con El Cubo?
La zona este de la ciudad de Tijuana está creciendo brutalmente. Se estima que hay más de un millón de habitantes. ¿Existe un plan para descentralizar los eventos del CECUT, realizar más actividades extramuros y así llevar la cultura a ésta y otras partes de la ciudad?
“Esa es una pregunta que nos hicimos al inicio de la gestión hace 7 años. Yo considero que la primera responsabilidad del CECUT es intramuros. Hay otras instancias de gobierno, del estado y el municipio, que bien pueden hacer este trabajo porque de ellos dependen por ejemplo las bibliotecas públicas, las casas de cultura o los centros comunitarios. Ahora bien, esto no exime la responsabilidad que tiene el CECUT de atender esos públicos, de ninguna manera, al contrario, pero la visión que nosotros tenemos es que a esos públicos los atendemos, pero los llevamos al CECUT, porque si bien es valioso un festival musical en una plaza pública o un teatro escolar en un patio de una escuela, la experiencia de entrar a una sala de espectáculos, que se apague la luz y se abra un telón es otra cosa (…) Nuestra primera responsabilidad es que esos públicos vayan al CECUT y así es como yo lo entiendo, en eso nos concentramos”.